Crema de Remolacha, fácil y sencilla

La Crema de Remolacha: ¡Una explosión de colores!

Esta receta de la Crema de Remolacha me la ha pasado mi amiga Vega. No hay cosa más sencilla, de color tan impactante como la remolacha, ese color rubí, es tan bonito. Su sabor no es muy acentuado, es suave y puede quedar muy delicada si se pasa por un tamiz.

Para estas fiestas pasadas las preparé en forma de chupito. A mis hijos les gustó mucho. Y a los mayores les encantó su sabor y textura. Ahora que ya no estamos en tiempos de fiesta también nos es efectiva para una dieta baja en calorías ya que esta crema es muy sana y sólo tiene unas 80 kcal por cada 100 g. Si queréis saber más sobre la remolacha aquí encontrareis más información

Vamos a por la receta, ¡ah! aquí os dejo el enlace del vídeo por si os interesa:

Ingredientes para 4 personas:

3 ó 4 unidades de Remolacha
400 g Patatas
100 g Cebolla
1 ó 2 cdas. de Aceite de Oliva Virgen
200 ml Nata Líquida (13 %)
Agua o Caldo Vegetal
Sal y Pimienta
Perejil y Queso rallado

Preparación:

• Comenzaremos cortando la cebolla en trozos pequeños para rehogarla en una para de cucharadas de aceite de oliva dentro de un cazo.
• Mientras la cebolla se rehoga, que no se dore solo ha de quedar blanca y casi transparente, añadiremos un poco de sal y tapada para que se rehogue más rápido.
• Pelaremos y cortaremos en trozos grandes las patatas.
• Pelaremos y cortaremos en trozos pequeños las remolachas. Aquí me puse guantes de silicona, porque la remolacha mancha mucho, y se ha de cortar en trozos pequeños porque es una raíz muy dura y cuesta de cocer.
• Una vez tengamos la cebolla a punto, introduciremos las patatas y las remolachas, cubriremos con agua o caldo. Taparemos y dejaremos cocer, vigilando que no se evapore todo el agua, hasta que este todo bien cocido. (30 a 40 minutos tranquilamente, o más!)
• Una vez cocido, lo colaremos todo, y reservaremos el agua de la cocción por si más adelante la necesitamos.
• Pasaremos las remolachas, patatas y cebolla a un baso batidor junto con la crema de leche, y trituraremos hasta conseguir una masa lisa. Si ha quedado muy espesa, iremos añadiendo el agua reservada de la cocción, hasta conseguir la textura deseada.
• Retificaremos de sal y pimienta.
• Pasaremos esta crema por un colador o tamiz y nos ayudaremos de un cucharón para ir tamizándola. Con esto conseguiremos que la crema quede de textura muy suave y delicada.
• Podemos servir la crema en recipientes individuales como entrante. O bien, en vasitos pequeños, en forma de aperitivo.
• Decoraremos con un poco de queso rallado y perejil.

Y eso es todo espero que os haya gustado.

También os puede interesar: